El documental, en la web maxaubmapa.com, plantea un recorrido sobre el legado y la vida de Max Aub

Max Aub Mapa es un documental-web sobre la vida y obra del escritor a partir del rastro de su biblioteca confiscada por el franquismo. La interactividad del documental supone un relato abierto que permite a los usuarios aportar contenido

El pasado 28 de julio, la Fundación Max Aub conmemoró los 50 años de la muerte de Max Aub (22.7.1972) con una doble presentación: el n.º 16 del Anuario Científico El Correo de Euclídes —dedicado especialmente a la publicación de estudios originales e inéditos sobre la vida y la obra de Max Aub— y la presentación del documental Max Aub Mapa, creado por la escritora Elisa Ferrer y el guionista y productor Fran Ruvira.

En 1969, Max Aub regresó a Valencia tras treinta años exiliado en México. En esta ciudad en la que creció, el escritor intenta recuperar lo que queda de su biblioteca de juventud, confiscada por las autoridades franquistas, y almacenada en la Biblioteca Provincial en 1939. Allí, en el edificio de La Nau, antigua sede de la Universidad de Valencia, se reencuentra con los tomos que dejó décadas atrás, unos libros que —según la jerga bibliotecaria— estaban «en el infierno». La biblioteca se había cerrado en 1939, con la confiscación de los volúmenes y el exilio del autor. Sobre su contenido, se estiman unos 10.000 libros, desde la poesía de San Juan de la Cruz, el teatro de Calderón y Lope de Vega hasta las novelas de Dostoyevski y los poemas y ensayos de Paul Valéry.

La colección arranca en 1919 y cuenta con un fondo mayoritariamente literario en el que se añaden ensayos sobre Filosofía, Geografía, Historia, Política y Ciencia. Como apunta Joan Oleza, catedrático emérito de Literatura Española de la Universidad de Valencia: «Lo primero que sorprende en la biblioteca de Max Aub es la vastedad de sus intereses lectores». «Sobre ese horizonte de intereses lectores, complementado por el conocimiento de Aub y las huellas que en ella se dan de sus lecturas, puede trazarse un mapa parcial», añade el profesor, que lo describe como un lector con mayor preferencia por la literatura contemporánea que por los clásicos.

Un recorrido vital que se inicia desde los orígenes de la familia Aub en París, la llegada de la familia a Valencia huyendo de la Primera Guerra Mundial; los años que el joven escritor descubre la capital valenciana del 1914 en plena ebullición política y empieza el bachillerato en el instituto Lluís Vives de Valencia; los años de la Guerra Civil; los campos de concentración y la huida constante hasta que se establece en México y se nacionaliza; y finalmente, la vuelta del exilio en 1969 cuando visita la Universidad de Valencia para reclamar el conjunto de sus libros perdidos, porque «Al final, somos lo que leemos», como declaró el propio Max Aub.