Sacrificio ofrece una narrativa brillante, divertida y profunda

Francisco López Serrano con Sacrificio. Diario de un matarife ha conseguido el XXI Premio de Novela Ciudad de Badajoz

Francisco López Serrano (Épila, Zaragoza, 1960) abunda en ambigüedades y sorpresas, cada una de sus entregas no dispensa tregua alguna a su mundo de ficción y con sus historias consigue, de alguna manera, sobrevivir en este enrevesado universo de la literatura y aún más superarse tras cada nuevo libro, dispuesto como cualquier combatiente a su siguiente misión.

Francisco López Serrano ha sido capaz de entregar a sus lectores volúmenes de una exquisita sensibilidad poética La caricia de un sueño (2002), La sombra de Dios (2005) o El último hombre sobre la tierra (2010), y ejemplares novelas repletas de sarcasmo e ironía El país de la lluvia (2004), Retrato del asesino en prácticas (2005) y El Prado de los Milagros (2008), El tiempo imaginario (2014), Los Misterios (2015), además de una más que considerable colección de cuentos y microcuentos El hígado de Shakespeare (2000), Dios es Otra (2002) y Los Hábitos del Azar (2009), El holocausto de las mascotas (2017) y Un momento, señor verdugo (2017) que, con el resto de su obra, conforman un universo literario particular.

Un descenso a los infiernos
De libro brillante y divertido, profundo y sutil se ha calificado Sacrificio. Diario de un matarife (2019) su última novela ha conseguido el XXII Premio de Novela Ciudad de Badajoz, una historia que comienza cuando JSH sale de la cárcel tras pasar veinte años encerrado por asesinar a su amante, un crimen que no recuerda haber cometido. Trabaja en un matadero, a ver si con el acto cotidiano del sacrificio consigue, de alguna manera, completar el puzzle de algunos de los recuerdos de aquel aciago momento. Curiosamente, mientras el protagonista se pelea con su memoria y trata de reconstruir el pasado y, de alguna manera, sobrevivir en un presente monótono y también no menos brutal, cerca de su lugar de trabajo se produce el asesinato de una prostituta que ha aparecido degollada y según los indicios el cadáver presenta el mismo corte que tanto llamó la atención en el juicio por el asesinato de su amante, será entonces cuando la historia lleve al lector a perspectivas narrativas más amplias, recibe la visita de una pareja de policías que investigan el suceso, aunque esta vez tiene la coartada perfecta, pues a la hora en la que la víctima fue asesinada él se hallaba degollando reses. Surge entonces una paradoja más en la vida de este matarife que, alertado por las circunstancias, comienza a investigar este nuevo suceso para aclarar su memoria y demostrar su inocencia en compañía de una meretriz con la que mantiene una relación. López Serrano realiza un auténtico descenso a los infiernos con su protagonista y todo ello sin saber que todos sus pasos están manejados por fuerzas secretas y siniestras., uno más de los guiños literarios a que nos tiene acostumbrado el narrador y que hacen de su literatura un auténtico disparate de imaginación y sabiduría humana.

Novela negra en estado puro
La trama de Sacrificio. Diario de un matarife , de una aparente sencillez, se irá complicando porque reúne todos los ingredientes para catalogarla en novela negra en su estado más puro, donde asoma la corrupción política, la conspiración y espionaje internacional complican la vida cotidiana del protagonista que en su autoculpa inicial y la imposibilidad de alcanzar la felicidad se verá empujado a un apocalíptico futuro que López Serrano expone como parodia de una novela que abre caminos a los diferentes géneros en los que se mueve la narrativa contemporánea, y a lo largo de la lectura, al hilo de la historia del matarife, descubriremos una entramada red con mesiánicas intenciones que le otorgan al relato ese humorismo irónico y jocoso que arranca la sonrisa de un lector que disfruta página a página esta historia casi absurda y no menos hilarante que caracteriza a buena parte de la obra del narrador maño, y que en esta ocasión justifica con ese agudo sentimiento de culpa que nos mantiene en vilo. A ese tema principal, aún se añade el hartazgo vital, el valor de la justicia, la sed de venganza y la redención en mitad del mundo del crimen, o la confabulación y la manipulación humanas.

La narrativa de López Serrano
Francisco López Serrano prosigue con sus historias indagando en las ambigüedades y sorpresas que subyacen en toda apariencia de normalidad, narrando el insólito encuentro que puede darse entre la realidad cotidiana y lo extraordinario, el giro inesperado que puede esperarse en cualquier situación por más anodina que se presente y es capaz de servirse de la digresión, de la observación atenta y de buena parte del artificio que rodea al texto en su sentido y significado más estricto. Así que sus lectores detectan la sutilidad tan característica en sus textos, o la libertad de elegir un espacio propio, en medio de una concreta temporalidad reconocible, aunque presente o pasado vengan suavizados por fantásticas apariencias, y solo importen aquellas que nos descubren las trivialidades de un mundo que, como en algunos de sus relatos, tengan un carácter mágico, capaz de trasmutar las vidas descritas en otra realidad, incluso la posibilidad de inventarse una nueva que finalmente les satisfaga; y el narrador lo logra a través de un tono elegíaco, henchido de humor y de ironía, como queda señalado, y rozando lo iconoclasta nos traslada desde situaciones cómicas a un trágico desenlace.