Según Comisones Obreras, el nuevo Ayuntamiento de Madrid manipula la realidad al anunciar un aumento de contratación del servicio de limpieza

«No deja de ser anecdótico que aquellos que generaron el problema en el servicio de limpieza en Madrid, pretendan dar ahora las soluciones a una de las principales causas de preocupación de los madrileños: la suciedad»

Según el sindicato Comisiones Obreras (CCOO), el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y su concejal de Medio Ambiente, Borja Carabante, manipulan la realidad al anunciar un aumento de contratación del servicio de limpieza para el denominado Plan especial de refuerzo de limpieza, cuando el número de operarios no se ha ampliado significativamente y cuando, además, este tipo de apoyos es habitual en verano.

Según el sindicato, la incorporación de 491 nuevas personas no es en realidad una ampliación del servicio del 26%, ya que estos nuevos contratos están en su mayoría destinados a cubrir las suplencias del periodo vacacional de los trabajadores de la limpieza de la ciudad de Madrid. Otras son, añade Comisiones, ampliaciones de jornada del personal contratado para sábados, domingos y festivos, con lo cual en ningún caso es un aumento significativo en la contratación, sino prácticamente un mantenimiento numérico de la plantilla existente.

Para el responsable de Limpieza Viaria, de Construcción y Servicios de Madrid de Comisiones Obreras, Daniel Gismero: «no deja de ser anecdótico que aquellos que generaron el problema en el servicio de limpieza en Madrid, pretendan dar ahora las soluciones a una de las principales causas de preocupación de los madrileños y madrileñas: la suciedad».

La suciedad que inició Ana Botella
El problema de la suciedad en la capital se instauró con los denominados Contratos de servicios integrados, cuando ostentaba Ana Botella la alcaldía del Ayuntamiento de Madrid por el PP, que supuso la pérdida de los estándares de limpieza existentes hasta el año 2008. El sindicato cree que los mismos deben ser recuperados, con la incorporación de 2000 trabajadores y trabajadoras reales al servicio y la modernización de la maquinaria y vehículos, que en algunos casos cuentan con más de doce años.
Para Daniel Gismero, el problema del estado de suciedad de la ciudad no se arregla con la gestión de «ocurrencias de feria de chistera a coste cero, de la que ha hecho alarde el nuevo alcalde, quedando demostrado que es una medida de autopropaganda vacía de eficiencia. Lo que hace falta es compromiso y responsabilidad política, y reconocer que el sistema de contratación instaurado en su día por el PP ha resultado nefasto para la gestión de la limpieza de la ciudad, como indican las encuestas sobre la preocupación de los madrileños y madrileñas. Lo que necesita la ciudad es una mayor inversión en el servicio para recuperar la plantilla y estándares a niveles del año 2008».
Por todo ello, Comisiones Obreras solicita que se convoque la denominada «Mesa de la limpieza» comprometida por el actual gobierno municipa para abordar la reversión del servicio de limpieza o la nueva licitación con las garantías necesarias para los trabajadores, para conseguir la calidad del servicio de limpieza para Madrid.