"El funcionamiento del Gobierno israelí se rige por una filosofía xenófoba y racista" - ¡Zas! Madrid
Jesús Valencia López de Dicastillo es Diplomado en Educación Social y columnista de los diarios Gara y Judimendikoak, y forma parte del equipo de redacción de Herria 2000 Eliza. Acaba de publicar en la editorial Txalaparta el libro Boicot a Israel, la solidaridad que demanda Palestina.
Defiendes en tu libro Boicot a Israel la necesidad de unirse al BDS (Boycot, Divestment and Sanctions), que representa un movimiento de presión en contra del gobierno de Israel para acabar con el genocidio palestino. En líneas generales, ¿qué supone este boicot y cómo se está llevando a cabo?
Desde que se inició la ocupación de Palestina, a comienzos del siglo pasado, los pobladores de dicho territorio han mantenido una defensa numantina de sus derechos tanto individuales como colectivos. Para reivindicar su causa han utilizados muchas y variadas estrategias: levantamientos espontáneos, lucha político militar, lucha de masas, participación en procesos de negociación….El 9 de julio de 2005, 172 organizaciones palestinas activaron una nueva estrategia: la campaña de boicot a Israel (BDS por sus siglas en inglés)
La campaña de boicot se inspira en la experiencia de Sudáfrica, cuando se desarrolló en todo el mundo una acción confluyente para acabar con el apartheid que se aplicaba en dicho país contra la población negra. Los objetivos de la campaña promovida por Palestina son tres: acabar con la ocupación y destruir el muro, garantizar la igualdad de derechos para toda la ciudadanía y, en tercer lugar, el regreso de los refugiados.
Por lo que se refiere al BDS, es un empeño por desactivar el sionismo: filosofía xenófoba, racista y discriminatoria que rige el funcionamiento del actual estado israelí; el boicot pretende deslegitimarlo ya que, bajo apariencia democrática, es rabiosamente discriminatorio y opresivo. La campaña promueve la descapitalización de Israel mediante la desinversión, las sanciones internacionales que lo coloquen en una situación de aislamiento y, en tercer lugar, el boicot propiamente tal.
Los impulsores de la campaña reiteran hasta la saciedad que no se trata de un rechazo a la población israelí en base a criterios étnico-raciales, religiosos o nacionales. El boicot se focaliza en instituciones, grupos o personas que tienen una participación directa en el mantenimiento del régimen sionista.
Y cómo son numerosos los intentos de normalización, son numerosas también las acciones de boicot: institucional, académico, cultural, artístico, deportivo, comercial…
En definitiva, el BDS es una apelación del pueblo palestino a la conciencia ética de toda la humanidad; un voto de confianza en uno de los filones más nobles que perviven en el ser humano: el sentimiento de solidaridad. La invitación esta abierta a todos los estamentos sociales aunque existe la convicción de que va a ser la sociedad civil la que va a llevar y está llevando el peso mayor de la campaña.
Esta iniciativa prendió pronto y con fuerza; bien pudiera decirse que respondía a un sentimiento generalizado de rechazo al sionismo y de adhesión al pueblo palestino. Se ha extendido a lo largo del mundo, ha provocado adhesiones de personas referenciales y ha promovido incontables iniciativas sociales. Incluso sectores tan refractarios como el mundo de las finanzas o de la diplomacia, van demostrando cierta permeabilidad a los requerimientos del BDS.
Denuncias la existencia de un verdadero régimen de apartheid en Israel, un sistema de segregación racial similar al que hubo en Sudáfrica. ¿En qué datos te basas?
La colonización de Palestina llevada a cabo por el sionismo es una de las experiencias de colonización más agresivas. Los invasores no se conforman con la instauración de un poder metropolitano y el establecimiento de unas nuevas reglas de juego impuestas por ellos. No les basta con explotar al máximo los recursos naturales de las tierras ocupadas y de exprimir la fuerza productiva de los pobladores originarios. El objetivo de los colonos sionistas es, desde el primer momento, ocupar la tierra y ahuyentar a la población nativa que la habita: “Vamos a intentar ahuyentar a la miserable población lugareña fuera de nuestras fronteras”, dijo en 1895 el padre del sionismo, Theodoro Herzl.
La limpieza étnica de 1948 y la de 1967 no fueron suficientes. Todavía quedaba una importante bolsa de población árabe que sobraba y molestaba a los nuevos ocupantes: “Los palestinos son las rocas de Judea, obstáculos que deben de ser removidos. La colonización exige reubicar a los árabes fuera del país” dice Hain Wetzman, líder del Congreso Sionista Mundial y futuro presidente de Israel.
Se han cumplido doce años del muro construido por Israel que afecta a medio millón de palestinos. Condenada por la ONU y la Corte de la Haya, la construcción se extiende a través de 273 kilómetros y separa a los campesinos de sus tierras y a las familias de sus lugares de trabajo y de los centros educativos y de salud.
Para ejecutar estos planes, los diferentes Gobiernos israelíes someten a la población palestina a unas condiciones de vida insoportables. Han separado a la población palestina estableciendo dos zonas incomunicadas: Cisjordania y Gaza. Esta se halla sometida a un cerco total desde el año 2006 sin poder comunicarse con el exterior ni por tierra ni por mar. Se apropian de los acuíferos de manera que los colonos dispongan de agua abundante y los nativos un caudal miserable. Se apropian de las tierras altas que pertenecían a los palestinos, incluso tras la partición territorial de 1948; en estas tierras ocupadas asientan nuevas colonias desplazando a sus antiguos pobladores. Se apropian de las tierras de cultivo destruyendo los olivares que son una de las bases de supervivencia. Se apropian de viviendas palestinas en Jerusalén Este de manera que sus dueños tienen que abandonarlas para ver cómo se instalen en ellas nuevos pobladores. Los trasportes son selectivos estableciendo servicios que son exclusivos para los judíos. Las carreteras son un hormiguero de controles de manera que los desplazamientos de la población palestina nunca se sabe cuánto van a durar. El muro que comenzó a construirse en 2002 serpentea arbitrariamente por Cisjordania convirtiéndola en minúsculos bantustanes completamente separados.
Dibujo de un niño palestino en contra de la destrucción de los olivos, por parte del ejército israelí.
La represión contra las protestas es el pan nuestro de cada día. La legislación que se aplica a la población palestina es durísima ya que corresponde a una legislación antiterrorista. Recientemente se ha aprobado un nuevo endurecimiento del Código Penal de forma que el arrojar piedras a los soldados israelíes puede ser castigado con 20 años de cárcel.
Las personas que deseen adherirse al BDS y no comprar productos fabricados en Israel, ¿cómo pueden informarse de cuáles son o dónde se venden estos habitualmente?
En nuestra economía, cada vez más globalizada, los productos israelíes están plenamente incorporados en el mercado mundial. Una de las formas de identificarlo es observar la etiqueta para ver si indica el “Made in Israel”. Otra opción es la de observar el código de barras que, en el caso de Israel, es el 729. Este indicador, aunque orientativo, no es infalible; Israel, para eludir el boicot, ha comenzado a comercializar sus productos a través de terceros países para eludir el etiquetado identificatorio 729.
Para realizar el boicot a los productos hechos en Israel hay que fijarse en el código 729, aunque Israel, para eludir el boicot, ha comenzado a comercializar sus productos a través de terceros países.
Dada la movilidad del capital, son muchas las empresas o grandes superficies que mantienen relaciones comerciales fluidas con Israel abriendo mercado a sus productos: El Corte Inglés, Mercadona, Carrefour, Imaginarium, Zara, Telefónica, Mango, Vodafone, Terra, Orange, Iberia. En otros casos, se trata de marcas que están invirtiendo en dicho país mediante la apertura de centros comerciales, como por ejemplo H&M y L’Oreal.
¿Cuáles son algunos de los productos de venta entre nosotros que provienen de Israel? La lista sería interminable pero me permito citar algunos: patatas LZR que se venden en Mercadona; naranjas Jaffa; Aguas Montaña Azul y otras marcas, comercializadas por Eden Spring que se pueden encontrar en hospitales, institutos, gasolineras; productos de la marca Carmel: Ecofresh Carmel, Carmel Bio – Top, Jaffa, Alesi y Coral, Vinos Carmel Mizrachi; productos Jordan River como Jordan Valley, Jordan Plains, King Salomon; bolsas de pipas (250 gramos) de la marca Eroski identificadas como “made in Israel”; cosméticos Ahava que son comercializados por Revlon; cosméticos Premier; Delta Galil Israel, uno de los fabricantes de ropa interior más grande del mundo, infusiones Tibetan Tea, fabricado por Arava Tea Ltd. Israel; Tecnotron. Fotomatones y cochecitos u otras instalaciones recreativas callejeras (100% capital israelí); bañadores Gedeon Oberson, Gottex, Sephora. Que comercializas sus propios “Made in Israel”.
En cualquier caso, quien quiera hacer una investigación más profunda sobre el tema puede consultar algunas web que ofrecen información más exhaustiva: www.boicotisrael.net: sitio web en castellano que recoge una extensa y rigurosa relación de objetivos a boicotear. www.nodo50.org/causapalestina: sitio web de la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina.
¿Existen judíos dentro y fuera de Israel que también se han unido al BDS?
En el trabajo que he publicado hago un reconocimiento explícito a las personas y comunidades judías que no comparten las tesis ni las prácticas sionistas. Ya desde el siglo XIX hubo algunas personalidades lúcidas (Asher Ginzburg, Ygael Glukstein… entre otros) que advirtieron del riesgo que implicaba la empresa colonial que se estaba preparando y de los inevitables conflictos que iba a generar.
El lanzamiento, en 2005, de la campaña BDS ha dado lugar a que algunos sectores judíos se incorporen a ella con entusiasmo y audacia. El que un judío promueva esta campaña está muy mal visto en sus propios entornos y, si es ciudadano isarelí, puede ser sancionado. En unos casos, se trata de compromisos personales algunos de los cuales me permito citar: Dror Elimelech Freilerl, antiguo paracaidista, músico y activista que vive en Suecia: “Todos y cada uno de nosotros debemos conocer, denunciar y hacer frente a esta situación”.
Gerald Kaufman, de origen judío y parlamentario británico:
“Mi abuela (asesinada por los nazis) no murió para encubrir a soldados israelíes asesinando abuelas palestinas en Gaza».
Illan Pappe, profesor judío exilado en Londres: “La ciudadanía del mundo está muy mal informada sobre el conflicto palestino y, con el cerebro lavado, ha aceptado una versión falsa. Los gobiernos deben de ser presionados y la ciudadanía debe de participar en el debate”, el profesor Jeff Halper niega al sionismo el derecho de utilizar las víctimas del holocausto:
“Les niego mi permiso al Gobierno de Israel y a los sionistas para que usen en su beneficio a los miembros de mi familia que fueron sacrificados por los nazis”.
Otro tanto han dicho 30 supervivientes del Holocausto cuando el ejército israelí bombardeaba Gaza en julio de este año.
En otros casos, han sido conocidas organizaciones judías como la Red Internacional de Judíos Antisionistas (IJAN) o la Red Judía Solidaria Internacional las que se han posicionado de forma colectiva a favor del boicot. A partir del año 2009, está funcionando Boykot from Within (Boicot desde dentro), movimiento que trata de impulsar la campaña dentro de las fronteras del propio Estado de Israel:
“La agenda política del Gobierno sólo cambiará cuando el precio de mantener el actual statu quo sea demasiado alto”.
Otros miembros de la comunidad judía participan como activistas en los diferentes grupos de apoyo al BDS que funcionan en los lugares donde residen.
Los propios organizadores de la campaña conceden gran valor al compromiso de estas personas: “Queremos destacar que mucha de la gente que en Israel apoya el boicot son activistas judíos”
¿Qué piensas de la existencia del llamado Estado islámico? ¿Supone un auténtico peligro para Occidente, tal y cómo declaran los gobiernos de los Estados Unidos y de numerosos países europeos? ¿Palestina forma parte de él?
Si creyera en los milagros, diría que el Estado Islámico es uno de ellos. Algo tan complejo como la organización de un ejército, se ha resuelto como por arte de magia. Una fuerza armada de estas características aparece de la noche a la mañana, dispone de un importante contingente de milicianos, cuenta con abundante y moderno material bélico, es capaz de conquistar en pocos días amplias zonas de territorio enemigo, dispersa a las fuerzas armadas oficiales como si fueran moscas, ocupa refinerías y crea una red comercial para vender el petróleo que producen dichas refinerías…..Y, todo esto, en un territorio plagado de hombres armados supuestamente contrarios y de servicios de espionaje muy experimentados.
Es evidente que el Estado Islámico responde a intereses económicos y políticos muy presentes en la zona y que han hecho posible su aparición y desarrollo ¿Cuáles pueden ser? Hay claves de intervención que son conocidas mucho antes de que hiciera su aparición el Estado Islámico: el imperialismo norteamericano-europeo está empeñado en reordenar todo el Oriente Medio; aunque mantengan entre ellos matices diferentes, el objetivo es común.
Han removido varios gobiernos de dudosa fidelidad y tratan de hacer otro tanto en Siria desde el año 2011; la presencia del Estado Islámico en Siria supone otro factor de desestabilización para el régimen de Damasco. Turquía se encuentra en la disyuntiva de colaborar con la OTAN en su castigo al Estado Islámico pero, al mismo tiempo, apoyándolo ya que enfrenta sobre el terreno a los kurdos. Israel alienta este fenómeno ya que debilita y enfrenta a los pueblos árabes; todo contribuye a su proyecto del Gran Israel.
El hecho de que dentro del Estado Islámico tengan tanta fuerza las motivaciones religiosas, es habitual. A lo largo de la historia ha sido muy frecuente el recurso a las diferencias religiosas para enfrentar y debilitar a quienes se consideran adversarios. El hecho de que los miembros del Estado Islámico hagan ostentación de una crueldad poco habitual y personalizada contra personas occidentales coloca en una situación incómoda a sus mentores. Tienen que hacer algo para sosegar a sus respectivas sociedades aterradas ante las imágenes de los degollamientos públicos pero, al mismo tiempo, tienen que aplicar unos castigos meramente correctivos. Las acciones de Occidente contra el Estado Islámico son un tirón de orejas; pretenden contener los excesos pero no destruirlo.
Palestina no forma parte del Estado Islámico. Son los aparatos propagandísticos del imperio los que siembra dudas sobre hipotéticas alianzas entre la causa palestina y el Estado Islámico. Es una de las muchas y miserables estratagemas para neutralizar la creciente corriente de solidaridad mundial para con el pueblo palestino.
¿Qué piensas de los aparentes enfrentamientos entre el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu con el presidente norteamericano Barack Obama?
No llegará la sangre al río. Se trata de discusiones entre colegas de la misma cuadrilla. Sus intereses estratégicos, militares, económicos son coincidentes. Pueden mantener diferencias en cuanto a los métodos de actuación, el ritmo de los tiempos, el matiz de sus mensajes… No hay que olvidar que a Obama le toca representar el papel de “demócrata” frente a los republicanos y a Netanyahu le toca lo contrario, ejercer de líder “duro” frente a los laboristas israelíes. Los norteamericanos necesitan de los sionistas pero no pueden dar la imagen de que bailan al son que estos les tocan.
Los sionistas necesitan de los norteamericanos pero el demostrar que no están sometidos a sus dictados (construcción de nuevas colonias) proyectan una imagen de independencia nacional que tanto agrada al chovinismo hebreo.
En cualquier caso, ya se encargan los lobies judíos en Norteamérica de ejercer de moderadores. Uno de sus papeles es el de templar gaitas para que las contradicciones no se agudicen excesivamente.
¿Crees que el lobby judío ejerce su dominio en España? ¿Dónde y de qué manera?
Se trata de un tema que me interesa mucho y sobre el que estoy recopilando algunos datos pero que, en cualquier caso, no lo he desarrollado en mi libro.
La investigación que he realizado para escribir el libro Boicot a Israel me ha permitido recoger algunos datos sobre las injerencias de estos grupos. En ocasiones es la Embajada israelí la que actúa como grupo de presión. El año 2010 estaba previsto que se celebrase en Hondarribi (Gipuzkoa) una semana de alta cocina con participación israelí y vasca; la Embajada israelí estaba detrás de aquella iniciativa. La movilización popular –con los hosteleros a la cabeza- provocó el rechazo popular y la cancelación del programa. La Embajada tomó cartas en el asunto para denigrar a los detractores. En septiembre de 2010 el Instituto de Estudios Europeos de la Universidad de Valladolid organizó una jornada con el título “Israel y la Unión Europea”; dicha actividad contaba con la colaboración de otro grupo pro sionista: la Asociación de Solidaridad España-Israel. En agosto de este año, un grupo de agricultores y ganaderos vascos tenían previsto realizar un viaje de hermanamiento con sus homólogos israelíes; detrás de dicha iniciativa estaba otro grupo pro sionista de reciente creación: la Asociación Euskadi –Israel Hatvaja.
Al margen de estas Asociaciones con una clara definición pro sionista, hay muchas organizaciones y personas que tratan de normalizar entre nosotros la imagen de Israel. Cito, como dato curioso, la estrafalaria anécdota que tuvo lugar en Granada el 6 de marzo de 2012. Aquel día se inauguraba la exposición 25 años de relaciones diplomáticas entre España e Israel; presidía el acto el también Presidente de la Asociación de Prensa de Granada, don Antonio Mora. Cuando iba a comenzar el acto oficial, dos chicas jóvenes se levantaron y exhibieron sendos carteles de denuncia del sionismo. El colérico don Antonio no anduvo con chiquitas, se quitó el cinturón con el que sujetaba sus pantalones y si dirigió hacia las activistas con intención de latiguearlas. Al día siguiente, y a requerimiento del Sindicato de Periodistas de Andalucía, tuvo que presentar su dimisión.
¿Qué opinas de que Suecia sea el primer país de la Unión Europea en aprobar a Palestina como Estado independiente? ¿Puede significar un cambio de rumbo en la política europea?
La actitud internacional respecto al comportamiento de Israel es de una escandalosa permisividad. Acabamos de conocer que el Tribunal Penal Internacional considera que el asalto del ejército israelí a la Flotilla de la Libertad (mayo de 2010) “no fue suficientemente grave”. El asalto de los soldados sionistas se saldó con nueve internacionalistas muertos y cuantiosos heridos.
Los Estados acostumbran a hacer prevalecer sus vínculos económicos y diplomáticos por encima de los derechos humanos del pueblo palestino. Pese a ello, la resolución de Suecia habría que considerarla como una ejemplar excepción. Las barbaridades continuas de Israel y el trabajo tenaz de los activistas a favor del boicot están contribuyendo a crear una mayor conciencia en las sociedades europeas. Yo estoy convencido de que las movilizaciones de la sociedad civil están moviendo, también la política de algunos Estados. Cuando se produjo el ataque naval que acabamos de citar, el Gobierno de Escocia prohibió la presentación, edición, distribución y venta de publicaciones israelíes. El Ministerio de Exteriores noruego negó la autorización para que probasen en sus aguas territoriales los submarinos alemanes que iban a ser vendidos a Israel. Cuando Irlanda asumió la Presidencia de la Unión Europea instó al resto de países para que exigieran a Israel un etiquetado especial en los productos que provenían de las colonias ilegalmente ocupadas.
Por lo que se refiere a Suecia, es evidente que la sensibilidad antisionista es alta. Cuando se produjo el mencionado asalto en aguas internacionales, los estibadores suecos fueron los primeros en responder a la agresión. Desbordando el acuerdo que habían adoptado varias centrales sindicales –mantener un boicot de tres días sin estiba- los suecos acordaron extender dicho boicot durante nueve días a los barcos que llegaban o que tenían previsto realizar embarques de carga con destino a Israel. También se han producido actuaciones ejemplares en el ámbito deportivo. El año 2010 estaba previsto que se jugase en la ciudad sueca de Malmoe un partido de clasificación para la Copa Davis de tenis; se iban a enfrentar el tenista israelí Harel Levy y el sueco Thomas Johansson. El partido hubo de celebrarse a puerta cerrada ya que la indignación social era muy alta tras el asalto reciente a la Flotilla.
Como constatación de que algo se está moviendo a nivel internacional se pudiera reseñar que el Parlamento británico, diez días después del reconocimiento sueco, aprobó por mayoría aplastante otra moción a favor del reconocimiento de Palestina.
En mayo de 1948, se inicia la operación limpieza étnica más cruel conocida en tiempos modernos. Este hecho, mas conocido como Al Nakba (en árabe significa catástrofe, calamidad o desastre), comienza cuando el 78 % de la población palestina en los territorios donde Israel implantó su estado en 1948, fueron violentamente expulsados de sus hogares. Hoy, y según cifras de la ONU, estos constituyen los más de 5 millones de refugiados que aún siguen impedidos de retornar a sus propias tierras.
Comments