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Y que no desesperen. El primer año es terrible, pero que no desesperen.
“Las ayudas al emprendimiento se las deben quedar entre cuatro” - ¡Zas! Madrid
Antonio Dúcar Bahón, un joven Ingeniero de Telecomunicaciones y profesor de Aikido, decidió abrir una Escuela Integral de Artes Marciales, DOJO ZENTRUM, en la calle Padre Rubio, 24, en septiembre de 2012. Un espacio con decoración y atmósfera oriental, bello y tranquilo, que ofrece las disciplinas de Aikido, Karate, Jiu Jitsu, Kobudo, Kendo, Defensa Personal, Krav Maga…, a precios asequibles e impartidas por grandes profesionales.
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«A la gente que va a emprender les aconsejaría que el número de socios sea impar y menor que tres»
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«Cuando se pone en marcha un negocio el primer año es terrible, todo son problemas»
¿Cómo se te ocurrió la idea de montar este negocio?
En primer lugar, quisiera decir que yo no lo veo exactamente como un negocio. Aunque sí es verdad que es una fuente de ingresos para mí es, sobre todo, una pasión. Llevo muchos años practicando artes marciales y también soy profesor de Aikido.
Pero, volviendo a la pregunta, la idea de abrir esta escuela se me ocurrió porque las artes marciales se suelen impartir en gimnasios. Hay muy pocos centros especializados. Las artes marciales requieren silencio, y el ruido habitual de los gimnasios -donde solo se cultiva el arte al cuerpo-, no es el lugar más propicio. Una persona que va a hacer pesas no entiende qué pintan unos vestidos como en el Japón del siglo XV.
Por eso, mi idea inicial fue sacar las artes marciales y otras disciplinas de salud similares, como son el yoga y el pilates, fuera de los gimnasios. Y así nació DOJO ZENTRUM, una Escuela de Artes Marciales que posee las condiciones propicias para practicarlas.
¿Durante cuánto tiempo maduraste esta idea?
Durante un año y medio. Yo soy Ingeniero de Telecomunicaciones y en la empresa en la que estaba el trabajo cayó estrepitosamente, apenas salían proyectos nuevos, así que tuve mucho tiempo para pensar.
¿Cuáles han sido los principales obstáculos que te has ido encontrado hasta conseguir abrir la escuela?
El principal problema que tuve fue encontrar un buen local. Estuve más de un año buscándolo. Necesitaba un espacio grande y diáfano y, aunque en Madrid existe muchísima oferta, no lograba encontrar el sitio idóneo.
También estaba la cuestión de la ubicación, que el local poseyese buenas comunicaciones, un público de renta media, etc. Todo esto se plasmó en un Plan de Empresa que elaboré detalladamente, y en el que tuve también en cuenta la competencia de la zona.
¿Y en cuanto al público objetivo, tu clientela?
Pensé en ello, claro, pero como llevo ya unos años siendo profesor de Aikido, sabía que muchos de mis alumnos me seguirían hasta aquí. Este es mi público principal, aunque también hay numerosos alumnos del barrio.
¿Tuviste muchas trabas burocráticas o problemas con la Administración?
Sí, es cierto que la Administración no da facilidades, al contrario, te exige numerosos requisitos. Primero, tuve que ir a la Administración para averiguar si el local tenía licencia y, aunque sí la tenía, no servía para este tipo de actividad. Después tuve que ir a una ECLU en donde me orientaron sobre qué hacer: la instalación del sistema eléctrico, las medidas contra incendios, la salida de emergencia…
¿Cuánto tiempo pasó desde que decidiste montar la escuela hasta que abriste las puertas?
Fue rápido. Como ya tenía el Plan de Empresa elaborado y el local apalabrado, fui a la Ventanilla Única Empresarial (VUE) de la Cámara de Madrid para presentar todo el papeleo y para que me guiaran en la puesta en marcha de mi proyecto. Así, en apenas tres meses, ya estaba dado de alta como autónomo, ya había hecho la reforma del local y también ya había comprado el mobiliario y el material suficiente para abrir las puertas.
¿Y las muy publicitadas ayudas al emprendimiento?, ¿has conseguido alguna?
Aconsejado por la VUE, solicité una subvención para autónomos emprendedores que ofrecía la Comunidad de Madrid. El requisito era haber hecho una inversión mínima de 5.000 euros. Yo había hecho una inversión de más de 15.000 euros, así que presenté toda la documentación necesaria. Tras más de año y medio esperando una respuesta, finalmente me ha llegado la resolución por parte de la Administración: denegada por inexistencia de crédito adecuado y suficiente. Ya el funcionario al que entregué los papeles me dijo que me olvidara…
«Las ayudas al emprendimiento se las deben quedar entre cuatro»
¿Cuál fue el proceso después de abrir el local? ¿Cómo te fue?
Durante el primer año todo son pérdidas y problemas. Cualquier persona que quiera emprender que tenga en cuenta que los imprevistos que se haya planteado, se triplicarán en el primer año. Todos esos gastos adicionales que surgían cada día, los tuve que afrontar yo solo. Los problemas siguen, pero después de ese primer año tan terrible, se asumen sin más.
¿Cómo has promocionado la escuela?
A través de la página web, que es atractiva y que contiene toda la información. La web ha sido lo que mejor me ha funcionado. También he utilizado las redes sociales como facebook y twiter.
De vez en cuando, hacemos publicidad a pie de calle con folletos, octavillas y demás. Se han repartido en Ciudad Universitaria y en los Centros Escolares de la zona porque también damos clases a niños. También está el boca a boca, que es el segundo medio más efectivo.
¿Necesitaste ayuda para elaborar tu Plan de Empresa?
No, lo hice solo. Basándome en el libro Aprender a crear una microempresa, de Raquel Saco y Maga Maza. Es muy ilustrativo y práctico.
¿Qué les dirías a las personas que estén pensando en emprender, en poner en marcha su sueño?
«A las personas que estén pensando en emprender les diría que no dejen de perseguir su sueño, pero con lógica. Que lo que quieran implantar tenga base. Su sueño tiene que tener los pies en el suelo»
En primer lugar, necesitan un público objetivo, una clientela, personas que posean esa necesidad.
En segundo lugar, les aconsejaría que si no tienen dinero suficiente –y siempre que el proyecto a poner en marcha no requiera de una inversión elevada- es preferible, si se puede, pedir pequeños préstamos a familiares y a amigos íntimos antes que recurrir a socios capitalistas, bancos o a entidades de crédito.
En tercer lugar, les aconsejaría que el número de socios sea impar y menor que tres… Ahí lo dejo.
En cuarto lugar, les recomendaría a la gente que desea emprender que intente no jugar todo a una carta. Que se diversifique y, sobre todo, que no se acomode. Si puede conseguir otras vías para vivir, que lo haga.
Y, por último, que realicen un buen Plan de Empresa que sea serio, bien elaborado. Y que tengan muy en cuenta el local, sobre todo si van a nutrirse de la clientela de la zona.
Y que no desesperen. El primer año es terrible, pero que no desesperen.
Esta Sección de EMPRENDEDORES quiere ser un espacio de proyección para todas aquellas personas que inician la aventura de crear su propio negocio: artesanos, cooperativistas, autónomos, microempresas…
Si quieres contar tu experiencia manda un correo electrónico a redacción@zasmadrid.es
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precios asequibles los cojones… en un rata de cuidado el Toni este..
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